Un joven de 17 años le disparó al agente en la cabeza y lo dejó en un delicado estado de salud. A pesar de que el joven tiene un frondoso prontuario, una jueza de Menores lo entregó en custodia a sus familiares
El hecho ocurrió mientras el efectivo prestaba servicios de custodia a operarios de la Empresa de Energía Eléctrica de Tucumán (EDET), en una villa de emergencia de la capital provincial.
El ataque se produjo en el barrio Juan XXIII, conocido como La Bombilla, donde resultó herido el suboficial Jorge Walter Brandán, quien se debatía esta tarde entre la vida y la muerte en la sala de terapia intensiva del Hospital Padilla.
El subjefe de la Policía Provincia, Nicolás Barrera, informó que el agresor tiene 17 años y es conocido en su barrio como "El Loco" Cristian.
El chico, según el jefe policial, disparó sin mediar diálogo con el efectivo. "Brandán realizaba la cobertura de resguardo de la integridad física de los operarios de EDET, que hacen trabajo en la zona, y en forma sorpresiva un menor de edad, a sangre fría, habría disparado contra su humanidad", aseveró Barrera.
El agresor se entregó luego en la Fiscalía de turno, a cargo de Alejandro Noguera, y desde la Justicia trascendió que ayer había cometido un delito contra la propiedad y fue dejado el libertad por la jueza de Menores, Nora Wexler.
Esta magistrada adoptó esa medida pese a que el chico tiene un frondoso prontuario.
Wexler decidió entregarlo en custodia a sus familiares, aún cuando la policía había reportado que tanto el chico como su madre habían agredido al móvil que lo había aprehendido para trasladarlo al Instituto Roca, donde se aloja a los menores de edad.
Fuente: DyN
No hay comentarios:
Publicar un comentario