SANTIAGO (AFP) — El vicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden, mostró en Chile un nuevo tono de Estados Unidos hacia América Latina, enfatizando la necesidad de cooperación y un cambio de política hacia Cuba, aunque sin llegar a levantar el embargo económico a la isla como han pedido los líderes de la región.
Tras participar en la Cumbre del progresismo en el balneario chileno de Viña del Mar y luego de una visita oficial a Chile, Biden planteó una renovación en los lazos con la región marcada por el fin de los tiempos en que Estados Unidos corría con voz propia.
"La época en que Estados Unidos dictaba unilateralmente, cuando hablábamos y no escuchábamos, se acabó. Deseamos conversar, deseamos una alianza", recalcó el vicepresidente de Barack Obama.
El diálogo comenzó a marcar una nueva pauta en la relación diplomática entre Estados Unidos y Latinoamérica, con el viaje de Biden a Chile, de la Secretaria de Estado, Hillary Clinton, a México la semana pasada, y el encuentro con los líderes regionales que tendrá el presidente Obama en la próxima Cumbre de las Américas.
"El presidente Obama y yo estamos totalmente dedicados a trabajar estrechamente con nuestros vecinos del hemisferio. Mi visita es sólo el comienzo de la renovación de nuestra alianza con las Américas", dijo.
La nueva alianza propuesta por la nueva administración estadounidense tiene como principal objetivo crear la confianza a nivel continental y sacar adelante a la economía estadounidense, algo que impulsaría a toda la región, según señaló Biden.
"Nuestra interconexión económica implica que la solidez económica de Estados Unidos es de beneficio para el hemisferio y puede convertirse en el motor que impulse el crecimiento económico de abajo hacia arriba y la igualdad en toda la región", precisó.
La lucha contra el narcotráfico en América Latina es otro de los puntos que sustentan el cambio generado con la llegada de Obama al poder con la región, "problema que todos compartimos, y debemos encontrar una solución definitiva juntos", sostuvo Biden.
El tema de la co-responsabilidad en el tema de narcóticos -reconocido por Hillary Clinton en México- puede marcar una diferencia en la forma de luchar contra ese problema, más aún cuando Biden reconoció que los esfuerzos hechos en México y Colombia llevarían a que ese fenómeno se desplace a Centroamérica.
La renovación en la relación de Estados Unidos con la región todavía tiene su piedra de tope en Cuba y las políticas de embargo, que no Estados Unidos no prevé cambiar en el corto plazo.
"No", respondió brevemente Biden ante la pregunta si en el marco de la política para América Latina de la nueva administración estadounidense se consideraría el levantamiento del embargo a Cuba.
"El presidente Obama y yo aclaramos durante la campaña que pensábamos que había necesidad de una transición en nuestra política hacia Cuba", declaró el vicepresidente.
Pero, agregó, "pensamos que son los cubanos quienes deberían determinar su destino y ser capaces de vivir en libertad y con la posibilidad de prosperidad económica".
En diciembre pasado en una Cumbre en Brasil, los países latinoamericanos pidieron a Estados Unidos cesar el embargo contra Cuba.
El vicepresidente Biden viajó este domingo a Costa Rica donde se reunirá con mandatarios de América Central destinada a hacer consultas para la próxima Cumbre de las Américas en Trinidad y Tobago del 17 al 19 de abril.
Copyright © 2009 AFP
No hay comentarios:
Publicar un comentario